El Ayuntamiento ha iniciado la segunda fase del plan de actuación del pantano de Las Medranas, centrada en la tramitación de la redacción del proyecto para garantizar la seguridad de la infraestructura hídrica y ponerla en valor. Es la Junta de Andalucía la que obliga al Consistorio a llevar a cabo una serie de medidas para asegurar el buen estado de este embalse catalogado como de categoría A, el más peligroso.
Hace unos meses se ejecutó una primera fase, en la que vació por completo la presa, la reforma provisional del aliviadero y del dique de fondo, la instalación de un vallado perimetral y la retirada de la pantaleta aguas abajo para evitar obstrucciones.
El teniente de alcalde de San Pedro Alcántara, Javier García ha indicado que la segunda fase contemplará la redacción del proyecto de ejecución por parte de la empresa de ingeniería Narval, especializada en infraestructuras hidráulicas, en coordinación con los técnicos municipales y del Gobierno autonómico, durante un plazo de seis meses dada la relevancia de la infraestructura.
“Ya hemos iniciado el expediente administrativo y se ha remitido a la unidad de contratación, porque queremos cumplir con los plazos marcados por la Junta y avanzar sin dilaciones”, ha afirmado el teniente de alcalde. Asimismo, ha explicado que “una vez aprobado el proyecto, se pondrá en marcha el inicio de la tramitación para la ejecución de las obras con una inversión superior a los tres millones de euros y, posteriormente, se acometerá la puesta en funcionamiento del pantano y su integración dentro de la red de espacios naturales y de ocio del municipio”.
Ha detallado que “en esta fase se va a eliminar una tubería en alta situada sobre la coronación de la presa y se llevarán a cabo nuevas intervenciones en el cauce y su entorno”, al tiempo que ha resaltado que “es un espacio que demanda una atención continua y un mantenimiento riguroso, especialmente ante fenómenos meteorológicos extremos como los vividos recientemente en otras comunidades autónomas”.
Por último, ha aseverado que “nuestro propósito es garantizar la seguridad de todos y poner a punto este espacio natural, desde un punto de vista medioambiental y para que sea un lugar recreativo muy potente para la ciudad en una zona central de San Pedro”.
Hay que recordar que la gestión de este embalse sampedreño ha sido muy deficiente desde hace muchos años. Así como las recientes actuaciones relacionadas con el traslado de la fauna que habitaba este pantano. Tal y como puedes ver en este artículo: