Piden que la última casa de la Colonia de San Pedro forme parte del patrimonio municipal

Hace más de 150 años Manuel Gutiérrez de la Concha, Marqués del Duero, creó San Pedro Alcántara, el núcleo de colonización más importante entre las 3.000 colonias que, aproximadamente, se desarrollaron en España en la segunda mitad del siglo XIX.

La Colonia supuso la construcción de innumerables edificios para el desarrollo de la vida social, cultural y religiosa de los colonos que en ella trabajaban. Dichas construcciones se alineaban en las calles creadas a tal efecto, como son la calle Marqués del Duero, la calle Lagasca, la calle Pizarro y la calle perpendicular que enlazaba con las tres anteriores, la calle Revilla.

Uno de las construcciones más importantes es uno de los últimos edificios que sobreviven: el viejo inmueble situado en la esquina de las calles Revilla y Lagasca, frente a un lateral de la iglesia y que destaca por su amplitud, que le permitió acoger los servicios religiosos hasta que la iglesia abrió al culto en 1869. También fue sede del Tribunal Agrario, en tiempos del Marqués del Duero, que dirimía los conflictos entre colonos. Se le conoció también como Casa de Escribientes, ya que durante algún tiempo residieron en ella los empleados dedicados a las labores de oficina de la colonia agrícola. 

Sin embargo su denominación más conocida es la de Economato, pues en el tránsito del siglo XIX al XX la propiedad de la colonia montó en él un establecimiento de este tipo que suministraba a los colonos con todo lo necesario para el día a día y las labores del campo.

Toda esta información histórica que justifica la importancia de este inmueble se sabe principalmente por el historiador José Luís Casado Bellagarza de la asociación San Pedro Alcántara 1860.

Actualmente, este testigo de toda la existencia de San Pedro no puede estar peor: con parte de la techumbre derrumbada y con grave riesgo de demolición. El interior está también en muy mal estado, aunque se comprueba  que en su interior sigue habiendo mobiliario y enseres de aquella época, puede que dentro  de esos muebles puedan existir documentación de la época que nos dé luz sobre la vida y la sociedad sampedreña de finales del siglo XIX. 

Por todo ello, tanto desde la asociación San Pedro Alcántara 1860 como desde Opción Sampedreña (OSP), requieren al Ayuntamiento que actúe: que expropie o compre el edificio colonial y le de un uso cultural o social acorde a su importancia.

San Pedro Alcántara 1860 ha mandado un escrito al Ayuntamiento recordando que en el Plan de Ordenación Urbana de 2010 (derogado en 2015) “se protegía como elemento de importancia histórica”. Por eso, solicitan que “que se adquiera por parte del Ayuntamiento para destinarlo a uso público. Que se recojan los elementos de interés de su interior, para lo cual esta asociación colaboraría en la tarea de su clasificación y divulgación”.

Por su parte, desde OSP, el concejal Manuel Osorio ha explicado a este periódico que existe un informe de Inspección Técnica de Edificios de fecha 13 de marzo de 2024 que resulta desfavorable dada las condiciones en las que se encuentra la edificación. En este documento, “se habla de un deterioro importante del edificio donde se pone de manifiesto la caída de la techumbre y la necesidad de su demolición y renovación de la misma y de la carpintería. También deja muy claro que aunque los muros tienen alguna que otra grieta, el edificio no corre peligro de derrumbe pero si es necesaria su puesta en valor de manera urgente” explica Osorio.

Por ello, desde Opción Sampedreña entienden que la Tenencia de Alcaldía “debe dar un paso adelante y asuma la puesta en valor del edificio para después poder instalar en el mismo un edificio de uso público de carácter cultura como podría ser un museo de la colonia”. Osorio recuerda que, según la Ley de Impulso para la Sostenibilidad del Territorio de Andalucía (LISTA) en sus artículos 7 y 8 recogen la obligatoriedad de conservación de los inmuebles, y además también recoge por interés público en su artículo 228, “la administración podrá acordar la expropiación de bienes o derechos por razones de interés público o social, conforme a la legislación aplicable, pudiendo incorporar dichos bienes al patrimonio público”.

Por todo ello, OSP presentará una moción en el próximo Pleno municipal para que se incluya en el nuevo Plan General la declaración de interés público para este edificio por su valor histórico y cultural, y por tanto que se proteja. También que se inicie el expediente para su adquisición mediante un expediente de expropiación con justiprecio y su incorporación al patrimonio público, que se recupere y rehabilite el edificio con el fin de a posteriori realizar un centro de interpretación, un archivo documental o un espacio cultural. Y, por supuesto, que bajo ningún concepto se permita el derribo integral del edificio por lo que representa histórica y culturalmente para San Pedro.