La Costa del Sol sigue consolidándose como uno de los destinos más codiciados para el mercado inmobiliario de lujo a nivel internacional. En este contexto, la prestigiosa agencia británica Beauchamp Estates ha inaugurado su primera oficina en Marbella, ampliando así su red global que ya incluye ciudades clave como Londres, Mónaco, la Riviera Francesa, Nueva York, Tel Aviv y Mykonos.
Fundada en 1979 por el reconocido empresario Gary Hersham, Beauchamp Estates se ha labrado un nombre propio en el mundo del lujo inmobiliario por su enfoque discreto y personalizado, especializado en operaciones ‘off market’. Entre sus clientes figuran emprendedores, magnates, celebridades y miembros de la realeza, quienes buscan mucho más que una simple residencia: valoran la privacidad, la exclusividad y la inversión estratégica.
“Marbella cumple con todos los requisitos que demandan nuestros clientes: un clima excepcional, propiedades exclusivas, un marco legal estable y un estilo de vida incomparable”, señala Gary Hersham, fundador de la compañía y propietario de una villa en la zona. “Nuestra llegada aquí no es una aventura temporal, sino un compromiso estratégico a largo plazo.”
La dirección de la nueva oficina recae en Erik Holmgren, profesional con más de una década de experiencia en el sector inmobiliario de alta gama. “La pandemia ha acelerado la demanda internacional de propiedades en destinos como Marbella, la Riviera Francesa o Dubái”, explica Holmgren. “En el mercado inmobiliario de lujo marbellí, el 90% de los compradores son extranjeros, por lo que contar con una red internacional como la de Beauchamp Estates nos posiciona de forma inmejorable.”
La reputación internacional de Beauchamp Estates se ha cimentado en transacciones inmobiliarias de altísimo perfil. La firma ha gestionado operaciones tan emblemáticas como la venta de Villa Les Cèdres en Saint-Jean-Cap-Ferrat (200 millones de euros), el ático La Belle Époque en Mónaco (143 millones de libras) y la residencia 2–8 Rutland Gate en Londres (225 millones de libras), considerada la propiedad privada más cara jamás vendida en el mundo.
A ello se suman otras operaciones de alto perfil, como el alquiler más caro en la historia del Reino Unido —280.000 libras semanales— y ventas recientes en enclaves como Hyde Park Gardens, Grosvenor Square y Chester Square.
Además de sus operaciones en el segmento más exclusivo, Beauchamp Estates también ha trabajado en propiedades vinculadas a destacadas figuras del mundo del espectáculo. En 2020, gestionó la venta de la residencia londinense que alquilaba Rihanna, una mansión de estilo victoriano valorada en 31,5 millones de euros. En 2024, fue responsable de la venta de la casa de la infancia de Cara Delevingne en Belgravia (casi 28 millones de euros), y recientemente ha puesto en el mercado el antiguo apartamento londinense de Mick Jagger por 6,5 millones de euros.
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