La ruta por el Monumento Natural Cañón de las Buitreras es todo un descubrimiento para cualquier senderista. El enorme tajo que el río Guadiaro forma a su paso por las calizas y margocalizas de este rincón enclavado entre el P.N. de los Alcornocales y P.N. de Grazalema es espectacular, con una caída vertical de hasta 200 metros. En sus paredes nidifican una amplia colonia de buitres leonados que dan nombre a este paraje situado en la frontera entre Málaga y Cádiz.

Tipo: lineal

Dificultad: media

Duración: 6 horas más o menos dependiendo del ritmo de cada uno

Distancia: 14 Kilómetros

Desnivel: 500mts de desnivel de ascenso 

Agua:  no hay fuentes en todo el recorrido

Recorrido fotográfico:

Esta ruta de 14 km parte desde la Cañada del Real Tesoro (Estación Cortes de la Frontera) y termina en El Colmenar (Estación Gaucín), en el confín noroeste de la provincia de Málaga. Dos son los ejes vertebradores de esta excursión: el río Guadiaro, que ha tallado a lo largo de milenios el increíble desfiladero de las Buitreras y la línea de tren Algeciras-Ronda-Granada, que se construyó hace cien años para conectar Gibraltar con el mundo y en cuyas coquetas y pequeñas estaciones podemos saborear el estilo victoriano de los creadores británicos de esta línea férrea. Ambos elementos nos acompañarán casi todo el tiempo. De hecho, el tren es fundamental para regresar desde el final de la ruta, en la estación de El Colmenar, hasta la estación de la Cañada del Real Tesoro. Por eso, conviene preparar esta excursión teniendo en cuenta el horario del tren.

El inicio de esta ruta comienza en la Cañada del Real Tesoro, el pintoresco nombre del barrio que creció alrededor de la estación de tren de Cortes de la Frontera. Desde el puente que atraviesa el río Guadiaro parte un carril en dirección Sureste que debemos recorrer durante un par de kilómetros.

La Cañada del Real Tesoro. El inicio de la ruta recorre el valle del Guadiaro entre fincas presididas por la sierra de los Pinos y la de Martín Gil que separan el valle de los Llanos de Líbar.

El carril atraviesa diversas zonas de cultivo, casas de campo y cortijos dedicados a la ganadería. Numerosos quejigos, algunos de notable porte, salpicaron la ruta en sus primeros kilómetros.

El carril pasa junto a quejigos de gran porte. Es una zona donde abunda la humedad.
Helechos creciendo en el tronco de un quejigo.

A los 20-30 minutos de ruta cruzamos un puente sobre el arroyo Salado. Tras dejar atrás el puente encontramos un cruce en el que tomamos a la derecha, por la pista que asciende.. Por la izquierda iríamos a Gaucín. El carril comienza un progresivo ascenso durante un par de kilómetros.

Al ascender ganamos vistas al fondo del valle del Guadiaro.

Tras alcanzar el puerto de La Fresneda, enfilamos el descenso, ya bien metidos en el valle del Guadiaro. Seguimos las marcas del GR 141 Serranía de Ronda en la etapa Jimera de Líbar-El Colmenar. Es este un sendero de gran recorrido circular que parte de Ronda por el valle del Guadiaro y vuelve por el valle del Genal. Son 110 km de recorrido en 6 etapas, ciclable en el 90%.

El carril inicia un descenso por una zona donde hubo un incendio hace unos años.
Cerdos apelotonados durmiendo la siesta mañanera en una finca privada pegada al camino.

En un altozano junto al camino, donde hay una torre de alta tensión, hacemos un breve receso para admirar el paisaje. Los cortados que veremos al fondo son el inicio de las Buitreras. El curso del Guadiaro se va encajando siempre flaqueado por las vías del tren Algeciras-Bobadilla, uno de cuyos túneles podemos observar en la parte inferior derecha de la foto.

El tunel por donde pasa el tren puede verse en paralelo al curso del Guadiaro.

La construcción y características de esta línea de tren es fascinante. Os remito a este blog http://viajesferroviarios.blogspot.com.es/2013/01/por-el-valle-del-guadiaro-ferrocarril.html, para saber más sobre ella. Volvemos a la pista para encaminarnos al collado que se ve al fondo, bajo el cual se intuye el llano herboso en el que se asienta la casa del Conde:

Este señorial cortijo conserva unos pesebres, horno y una era.
Abrevadero para las bestias.

Por detrás del cortijo sale un sendero, a tramos cerrado por los matorrales, que nos acerca en unos 10 minutos a un mirador privilegiado sobre las Buitreras.

Mirador sobre el desfiladero de las Buitreras.

Es muy posible que podamos ver decenas de buitres sobrevolándonos desde este mirador. Tras deleitarnos con las vistas y el vuelo de estas aves, volvemos sobre nuestros pasos hasta el cortijo del Conde. Sus ruinas denotan que fue un importante cortijo enclavado estratégicamente a la entrada del Cañón de las Buitreras.

El sendero, marcado por balizas del GR nos encaminan en descenso hasta el Puente de los Alemanes, por donde cruzaremos el desfiladero de las Buitreras.

Lo cierto es que no es un puente, sino una conducción que transporta el agua del río para la central hidroeléctrica de El Colmenar. Y no fue construido por alemanes sino por belgas allá por 1918.

Llegamos a la parte más delicada de la ruta, el descenso hasta el puente de los Alemanes. Se salva con un poco de prudencia y la ayuda de unos escalones tallados en la roca y unos cables de acero.

Cañón de las Buitreras.

Las vistas del Cañón desde el puente son espectaculares. En algunos punto apenas hay unos metros de separación entre las paredes. Palmitos, encinas y otras plantas han colonizado de manera casi imposible los cortados.

Tras el puente debemos cruzar un corto tunel donde hay que tener cuidado con la cabeza por que el techo está bastante bajo.

Una vez cruzado el puente atravesamos un pequeño túnel y salimos al margen derecho del Cañón, que no abandonaremos hasta el final de la ruta. En este punto el Gr 141 comparte camino con el Sendero Local Sl-A 034 que nos conducirá en menos de 5 kilómetros hasta El Colmenar.

Nos toca ahora una exigente subida que en un corto trecho nos hace subir 100 metros de desnivel hasta auparnos a lo más alto de las Buitreras. Podemos recuperar el aliento disfrutando de unas grandes vistas al valle del Guadiaro tras su paso por el desfiladero. La línea del tren se ve a nuestra derecha.

Vistas desde lo alto del desfiladero.

Descendemos por un sendero bien trazado y señalizado, con tramos de escalones que nos hacen descender deprisa. Llegamos a un mirador que hay a mitad de camino que te sitúa a veintena de metros de la pared del Cañón. Es un lugar ideal donde ver buitres en las paredes calizas que tenemos tan cerca.

Mirador de las Buitreras.
Buitre en su nido frente a nosotros.
Espectacular vista de la grieta que el río Guadiaro ha tallado en la caliza.

Impresionante Monumento Natural que ha esculpido el Guadiaro, uno de los ríos más importantes del sur de España. Desemboca en el Mediterráneo después de recorrer 183 kilómetros y salvar más de 700 metros de desnivel. Se forma en la confluencia de los ríos Guadalcobacín y Guadalevín, cerca de Ronda, y delimita al Parque Natural Sierra de Grazalema por su parte Este. Durante su recorrido, recoge el agua de varios arroyos, uniéndosele el río Genal a la altura de Casares y el río Hozgarganta a la altura de San Martín del Tesorillo, terminando su recorrido en la localidad de Torre de Guadiaro.

Puente colgante sobre el “vacío” que facilita el paso por una de las cañadas que tributan al Guadiaro.

Hemos dejado atrás la charca del Moro, justo a la salida del desfiladero y donde en verano muchos bañistas acuden a disfrutar de las frías aguas. En una de las paredes calizas de la charca se encuentra un placa que señala la ubicación de la surgencia de las Buitreras. El origen del agua que emana de ésta, enfriando notablemente el cauce,  se encuentra en la Sima del Republicano y otros sumideros kársticos de la Sierra de Grazalema. Con lo que las aguas infiltradas resurgen a unos dieciocho kilómetros de distancia y seiscientos de desnivel. Un largo y oscuro viaje. Para quien pueda interesarle os pongo un enlace al post de este blog:

http://sifonesandaluces.blogspot.com.es/2012/04/la-surgencia-de-buitreras.html

Sendero junto al río Guadiaro.

Nos resta un paseo de ribera por un sendero que sube y baja acercándonos a veces al río antes de subir con decisión hacia la central eléctrica de El Colmenar. Tras rodear el tubo de la central nos resta un tranquilo paseo hasta la estación de Gaucín (El Colmenar), donde podemos tomar algo en un bar antes de coger el tren que nos devuelva al punto de partida de esta espectacular ruta.

El Colmenar.

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