El uno por el otro y la casa sin barrer. Llevamos años esperando a que el Gobierno Central apruebe el Informe Ambiental necesario para que se construyan los espigones en Marbella y San Pedro y ayer el subdelegado del Gobierno, Javier Salas, ha asegurado que llevan desde septiembre esperando a otro informe, el que tiene que emitir la Junta de Andalucía para coger la arena del río Genal con la que regenerar las playas marbellíes y sampedreñas. Y sin este último informe no se puede aprobar el Informe Ambiental.
Nuestras playas, y los futuros espigones, están atrapados en la burocracia y en la lucha entre administraciones (Junta, Gobierno, Ayuntamiento, etc.) desde hace años. El subdelegado del Gobierno ha asegurado que llevan más de seis meses esperando a que la Junta de Andalucía les remita el Informe que autoriza a usar la arena del Genal y en qué punto del cauce se podrían recoger los áridos, y que es obligatorio para poder aprobar el Informe Ambiental necesario para licitar las obras de los espigones. Hay que recordar que hace dos años, en mayo de 2022, Salas aseguraba a los medios de comunicación respecto al Informe Ambiental que “este documento estará listo muy probablemente en el primer semestre del año que viene (por 2023). Después quedará licitar las obras y comenzarlas”. Ahora un informe tiene atrapado a otro informe.
Sobre este desencuentro de informes conviene recordar que, tal y como publicó El Periódico de Marbella en este artículo, https://www.elperiodicodemarbella.com/nuevo-paso-para-los-proyectos-de-los-espigones-en-marbella-y-san-pedro/, desde la Asociación de Espigones Emergidos para Marbella aseguraron hace casi un año, en junio de 2023, que “uno de los obstáculos era la exigencia desde el Ministerio de Transición Ecológica de un informe que recogiera exactamente el punto del que se iba a sacar la arena, concretamente del río Genal, afluente del río Guadiaro”. Según la asociación, ese informe complementario al Informe Ambiental, ya está mandado a Madrid. Con lo cual, o se mandó hace un año, según dicen unos, o llevan seis meses esperándolo, según otros. Y la casa sin barrer.
HISTORIA DE UN PROYECTO QUE NO SE CONCRETA
El 19 de septiembre de 2019, el Boletín Oficial del Estado (BOE) anunciaba que El Ministerio de Transición Ecológica formalizaba el contrato para la redacción del proyecto de mejora de las playas de Marbella con la empresa Betancourt Ingenieros S. L. P. por un montante de 35.065 euros. Tras su publicación, la adjudicataria disponía de un total de ocho meses para redactar dicho proyecto. De esta manera, se esperaba que el documento que habría de servir como hoja de ruta para la regeneración y rehabilitación de las playas más céntricas de la ciudad, en concreto el tramo que va desde La Venus hasta la playa de El Ancón, estaría listo para mayo del 2020.
A continuación, en mayo de este año 2021, dos años después de lo originalmente previsto, el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, a través de la Dirección General de la Costa y el Mar anunciaba que sometía a información pública el proyecto para la regeneración de las playas del centro de Marbella, así como su estudio de impacto ambiental junto al proyecto básico de remodelación del paseo marítimo del tramo litoral.
A día de hoy todo el proyecto sigue en trámite. Además, una vez estén los dos informes aprobados queda iniciar el proceso de licitación de las obras y su ejecución. El único consuelo es que, según ha asegurado el subdelegado del Gobierno, “los 16 millones de euros que cuestan ambos proyectos de Marbella y San Pedro están consignados”.
Los proyectos de regeneración de las playas de Marbella y San Pedro contemplan la instalación de los dos diques exentos entre la playa de la Bajadilla y el Ancón, los cinco espigones entre los ríos Guadalmina y Guadaiza y los 400.000 metros cúbicos previstos para recuperar el litoral y que se sacarán del río Genal. La inversión total asciende a casi 16 millones de euros: 7.4 millones el proyecto de San Pedro y 8.5 millones el de Marbella.